Son “libros que cuentan y
recitan poesía gracias a su infinita gama de aromas” es la
definición de los vinos de Jerez de Francisco Patón, Director de
Alimentación y Bebidas del Hotel Urban. Son tan versátiles que
pueden sustituir licores, destilados o acompañar cualquier
situación. Para demostrarlo, la coctelería del Hotel Urban, el
Glass Bar, ofrece una carta de 15 combinados basados en los vinos de
Jerez y Manzanillas de Bodegas Barbadillo: la Manzanilla Solear, el
Oloroso Dulce San Rafael, el Oloroso Seco Cuco y el Pedro Ximenez La
Cilla. Se recogen en un recetario con los ingredientes de cada uno de
los cócteles según las elaboraciones del Barman del hotel, Oscar
Durán.
Una reivindicación cultural
Los vinos andaluces han tenido
siempre protagonismo en el Urban tanto en la carta de su restaurante
el Europa Decó como en el bar de la terraza del hotel y también en
el Glass Bar. Los nuevos cócteles con vinos de Jerez en el Glass Bar
complementan su carta de gintonics y de cócteles propios. Responde
al empeño del equipo del Urban y de Bodegas Barbadillo por descubrir
estos vinos generosos, fruto de años, sabiduría, paciencia y
tradición, bandera de una cultura única en el mundo. Disponibles en
la terraza en verano, es el Glass Bar el que acoge durante todo el
año a los amantes de la coctelería.
En la carta, fruto de la
colaboración entre el Hotel Urban y Bodegas Barbadillo, pueden
encontrarse las mezclas que Oscar Durán y Paco Patón proponen
teniendo en cuenta las densidades y aromas de cada vino con un
objetivo común: popularizar su degustación, rejuvenecerla y seducir
al público del Glass Bar. El resultado son unas copas de gran
calidad, cinco familias componen esta propuesta andaluza: las sherry
tónica, los rebujitos, los mojitos, los sour y los cobbler.
“Del sol de Andalucía a la
Luna de Madrid” es el subtítulo de esta carta basada en los
sabores únicos de Jerez. La Manzanilla Solear es la protagonista de
muchos de sus cócteles: Desde la refrescante sherry tónica de
manzanilla hasta los alegres rebujitos que cambian de color según la
receta: arándano y fresa para el rojo, melón y licor japonés de
melocotón para el verde, arándanos con curaçao azul para el
rebujito azul y regaliz para el negro. Los rebujitos de colores son
las creaciones más originales de la nueva carta del Glass Bar, el
aperitivo perfecto.
A media tarde los mojitos
resultan sorprendentes y elegantes. Un claro ejemplo es el mojito de
Pedro Ximenez La Cilla con un toque de jengibre que le proporciona un
aroma oriental muy especial. Los mojitos de Oloroso Dulce San Rafael
y de Oloroso Seco Cuco suponen también una buena alternativa al ron
resultando más suaves. Copas de noche son el sour y el cobbler de
Manzanilla o de Pedro Ximenez, así como el cobbler de Oloroso Dulce
con zumo de arándanos y sirope de frambuesa.