El árbol resulta muy vigoroso, con ramos erguidos y copas con tendencia vertical. Su fruto, la oliva, posee una forma alargada, asimétrica ligeramente bombeada por el dorso. De volumen medio (2.7 gramos) con una relación pulpa/hueso de 5.3 y un rendimiento graso aceptable del 18,3%.
La maduración de sus frutos es temprana va desde la primera semana de noviembre a la primera de diciembre. La baja resistencia al desprendimiento y el porte erguido de sus ramas lo hacen ideal para la recolección mecanizada.
Sin embargo, puede presentar problemas de cuajado de frutos y de daños por heladas invernales. Es muy apreciada por su productividad y la excelente calidad del aceite.