Las raíces del presidente Obama están en Kenia, con el lugar de nacimiento de su padre en la pequeña ciudad de Nyangoma - Kogelo en el oeste de Kenia, cerca del Lago Victoria y la tercera ciudad de Kenia, Kisumu. Esta conexión ha colocado la zona en el mapa turístico fortaleciendo el desarrollo y la economía en la comunidad local, y los turistas a descubrir una nueva zona.
La Kenia occidental ofrece mucho más que el enlace con Obama, ya que los visitantes también pueden descubrir lugares como las cuevas de sal del Parque Nacional del Monte Elgon o escalar el pico de la montaña; ver flamencos a lo largo de las orillas del lago Victoria, que es el segundo lago de agua dulce más grande del mundo; explorar la ciudad portuaria de Kisumu con su arquitectura colonial y visitar el sitio arqueológico en Rusinga dónde, Mary y Louis Leakey en 1948, descubrieron un esqueleto completo de más de 18 millones de años que tenía más parecido con un mono que con un humano.
Para los entusiastas del senderismo, Kenia es un mundo de altos y bajos, desde el segundo pico más alto de África en el Monte Kenya a las llanuras desérticas del norte. Hay una amplia gama de excursiones desde tranquilos paseos entre colinas, a través de cordilleras con muchos animales hasta rutas con mucha altura. Para los que aspiran a las altitudes, los escaladores deben ser conscientes de la dificultad técnica que supone el poderoso pico del Monte Kenya que con sus 5199 metros solamente es 696 metros más bajo que la montaña más alta de África, el Kilimanjaro, de 5895 m.

El norte de Kenia tiene una cultura próspera de camellos, y el camello es utilizado por muchos tribus nómadas. Estas tierras desiertas, amplias y áridas hace mucho que se cruzan con caravanas de camellos siguiendo las antiguas rutas a través de profundos valles y a lo largo de sinuosos cauces de ríos secos. Un safari en camello es una manera única de ver este país. Los desiertos sin caminos y las cordilleras altas de la frontera norte son lugares hermosos y remotos, completamente aislados del mundo moderno. Caminando a través de este desierto con una caravana de camellos, acampar en la naturaleza y dormir bajo las estrellas, es viajar a través de una África intacta desde que pasaron los primeros exploradores.
